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| Fabio Biondi dedicando un disco a Lucio Rivas |
El célebre Fabio Biondi, al frente de su formación La Europa Galante, ha estado de visita en el Auditorio Nacional de Música de Madrid, mostrando su ya consagrado arte en la interpretación de la música barroca, ofreciendo dos conciertos.
El primero de ellos en la sala sinfónica tuvo lugar el pasado lunes día 26 de enero, siendo el programa la ópera Adriano in Siria de Veracini. La verdad es que no entiendo muy bien la tendencia que últimamente se aprecia en los intérpretes de música barroca, de pretender recuperar obras poco conocidas, que aunque sean del período barroco, no por ello muchas de esas obras alcanzan un nivel de calidad al que estamos acostumbrados. En este caso el arte de La Europa Galante y sus intérpretes solistas estuvieron muy por encima de la discreta obra de Veracini.
Es de destacar la soberbia interpretación de Roberta Invernizzi que estuvo sencillamente insuperable, muy bien también la contralto Sonia Prima en su difícil papel de Adriano, si bien su indumentaria no era la apropiada, ni mucho menos para interpretar en el Auditorio. Su potente voz y su imagen recordaba a Joyce Di Donato. Por el contrario, destacó la mezzo Lucia Cirillo que es la única que portaba un vestido propio del evento, perfecto en su color y forma, sin estridencias ni innecesarios adornos.
La ejecución de la obra fue perfecta por todos sus miembros, salvo un ligero despiste por parte de Paola Poncet al clave con las partituras.
El tratamiento otorgado a los recitativos no logró mantener la continuidad con la transición de las arias, como si consiguió el pasado día 18 la Boston Early Music Festival Orchestra, con la interptretación de la obra Niobe, Reina de Tebas de Agostino Steffani, si bien en este caso el excesivo amaneramiento y afán de protagonismo del concertino nada tenía que ver con la discreta pero a la vez impecable ejecución virtuosa de Biondi.
Que buen detalle por parte de Fabio Biondi felicitar individualmente a cada uno de los cantantes al final de cada uno de los actos de la ópera.
El miércoles 28 de enero protagonizó un muy interesante concierto en esta oportunidad en la sala de cámara, cuya segunda parte la consistía en las célebres obras del opus 8 de Vivaldi, conocidas como las cuatro estaciones que se ejecutaron como una sola obra, donde el mítico Biondi estuvo magnifico. Si bien, con el único lunar de que el tempo del tercer movimiento del invierno fue ejecutado como casi un andante y no como un largo, que es el tempo que le corresponde, lo que no permitió el deleite que los bellos pasajes de la pieza merecen. Creo que todos los interpretes de esta obra persiguen de forma premeditada diferenciarse de la sublime y clásica ejecución que en su día hicieron I Musici con Felix Ayo, aunque si es la mejor versión no hay nada que obligue a separarse de ella.
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