Algunos lectores me han preguntado sobre mi marca de gemelos predilecta. A este respecto he de confesar que tengo una gran debilidad por los gemelos de la gama denominada gemelo-joya, que son piezas verdaderamente elegantes y excepcionalmente bellas.
Pero de todos ellos, los gemelos de David Webb son mis favoritos.
Los denominados como gemelos-joya, tienen muy buenos representantes en marcas como Van Cleef, Cartier o Tiffany, que hacen piezas realmente admirables. Pero el diseño y la finísima joyería de David Webb, captan siempre mi mayor admiración.
David Webb no es demasiado conocido si lo comparamos con Cartier, por ejemplo, pero sus piezas alcanzan para mi gusto la categoría de pequeñas obras de arte.
La firma Webb surge a finales de los años cuarenta en Nueva York, y sus diseños se distinguen por un uso atrevido del color, la dimensión, y la atención meticulosa de los detalles. David Webb destaca por tratar temas de animales donde, por ejemplo, las ranas parecen poder saltar de los puños.
Los diseños de Webb también incluyen el cristal tallado, así como el esmalte mezclado con una combinación llamativa de diamantes y de piedras semipreciosas.
La inspiración surge a menudo del reino animal. Las piedras preciosas de colores parecen dar vida a la fauna.
Resulta fácil apreciar la directa influencia de Fabergé o Cellini y, en general, la joyería del siglo XIX cuando la joyería se consideraba más arte que mercancía comercial.
David Webb nació en Carolina del Norte y comenzó a diseñar joyas cuando era un niño. Aprendió en la fábrica de plateros de su tío y conoció técnicas de forja metálica. Webb llegó a Nueva York a la edad de diecisiete años y consiguió un trabajo de reparación de joyas en Greenwich Village.
Abrió su primera tienda en 1945. Sus diseños inmediatamente llamaron la atención de los grandes almacenes, y sus constante cuidado por los detalles no pasó inadvertido a los más exigentes conocedores del diseño.
Son célebres sus piezas Art Decó que combinan diamantes, esmalte y perlas de los mares del sur, que siguen teniendo plena vigencia.
La joyería de David Webb se ha asociado con las estrellas de cine. Ava Gardner y Lana Turner usaban joyas de David Webb tanto dentro como fuera de la gran pantalla. Siendo también sus clientes la Princesa Grace de Mónaco, la Duquesa de Windsor o Jacqueline Kennedy.
Los gemelos de David Webb son piezas únicas, de una belleza admirable y que destacan siempre en cualquier ocasión, pero no son de uso cotidiano, sino que debemos reservarlos para ocasiones especiales, sobre todo porque el precio de cada par de gemelos de David Webb asciende a varios miles de euros. Los más baratos parten de unos 3.000 euros aproximadamente y ahí hacia arriba, lo que nuestra imaginación y bolsillo nos puedan permitir.
Lucio Rivas
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