Hemos visto en alguna entrega anterior, como combinar los calcetines. De todas las posibilidades existentes hay una que merece comentarios especiales, por lo interesante que resulta y porque no es tan sencillo como parece el poder explotar esta opción.
Aquí vamos a dar unas fáciles reglas para poder combinar con acierto esta siempre fascinante posibilidad.
Esta combinación resulta más difícil de lo que a primera vista pudiera parecer. El motivo radica en que la corbata, por un lado, obedece a unos criterios de combinación muy diferentes de los que deben observarse para los calcetines, por lo que encontrar un punto de unión o nexo causal entre una y otra prenda no siempre es fácil de conseguir.
La clave para el éxito en esta combinación se encuentra en el equilibrio que, desde el punto de vista armónico, debe existir en todas las tonalidades de las prendas concurrentes que son, además de los calcetines y la corbata, la camisa, la chaqueta y el pantalón.
La lógica nos indica que cuantas más prendas intervienen en el equilibrio cromático, menos facilidad tendremos para logar la armonía de colores, por la sencilla razón de que hay muchos más factores y elementos concurrentes en juego.
De todas las opciones, la más sencilla será siempre la que se haga sobre la base de un traje que sobre la base de la combinación de americana y pantalón.
Si partimos de la premisa de un traje, la complicación se reduce considerablemente, y ello porque no existe un color diferente entre americana y pantalón.
La corbata debe siempre hacer contraste con la camisa, como ya sabemos, y paralelamente debe armonizar con la americana. Por su parte, los calcetines deben combinar bien con el pantalón o bien con los zapatos, lo que supone que es aquí donde se encuentra el nexo de unión, es decir, en el color del traje.
En las combinaciones de la corbata con los calcetines hemos de tener presente que los supuestos en los que la corbata combine con el conjunto, no necesariamente debe llevar aparejado el hecho de que suceda lo mismo con los calcetines. Es más, hay supuestos donde estas combinaciones no funcionan, y sucede siempre que se trata de corbatas de tonos claros:
Lo mismo sucede cuando llevamos corbatas de fantasía. El resultado puede ser muy poco elegante. Por ello es aconsejable siempre innovar, pero sabiendo con claridad los límites que no pueden traspasarse.
Lucio Rivas
Esto sí es hilar fino, especialmente en un país como España donde la gente oculta los calcetines como si de las partes íntimas se tratara. No puedo por menos de dar las gracias por esta entrada. A ver si contribuye, aunque solo sea un poco, a quitarnos la manía de dejar los pantalones hasta el suelo, como aquel que dice.
ResponderEliminarMuchas gracias, celebro le haya gustado. Con respeto a la sugerencia formulada le remito al artículo publicado en el blog el día 31 de diciembre de 2016, que lleva por rubrica "El largo correcto de los pantalones", donde abordo el tema por usted planteado. Reciba un cordial saludo.
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