EL CHALECO AMARILLO

El color amarillo tiene un significado y simbolismo interesante, ya que se le asocia con la felicidad, la alegría y el optimismo. Este color en un chaleco puede aportar resultados muy interesantes.

Aunque todo el mundo es capaz de distinguir el amarillo de los demás colores, no todo el mundo conoce que existen más de 100 tonalidades diferentes de este color.

El amarillo es uno de los colores primarios, ya que no es el resultado de ninguna mezcla. Es un color claro y luminoso, razón por la cual se le asocia con el sol; de ahí que al mismo tiempo, también se relacione con el conocimiento y la inteligencia; ya que tanto lo primero como lo segundo, a lo largo de la historia se ha representado simbólicamente mediante el astro rey.

En la naturaleza, el amarillo ocupa un puesto muy importante. Es el color del verano y también es el color que más abunda en las flores. Es el color de los cereales como el trigo y la avena. En suma, un color alegre.

Si se quiere destacar mediante algún color en nuestra indumentaria, este sin duda es el amarillo. No olvidemos que este color se utiliza para llamar la atención, como por ejemplo con los chalecos reflectantes que son de color amarillo, o marcadores, señales de tráfico y carteles, que suelen ser de color amarillo; porque de este modo es más fácil atraer las miradas. 

Precisamente por esa circunstancia el color amarillo no debiera ser nunca el color de un traje, porque es tan fuerte el impacto visual que provoca, que en lugar de destacar llamará la atención de una manera desproporcionada, lo que supondrá la pérdida de toda elegancia, dando la sensación más bien de ir disfrazado.

Por el contrario, el color amarillo si puede convertirse en un color ciertamente interesante y dotado de elegancia, cuando lo utilizamos en algunos complementos, porque nos aporta ese toque, esa pincelada que puede transformar un conjunto serio, aburrido e insulso en algo diferente. Pues bien, uno de los complementos que posibilitan, a través del color amarillo la transformación de nuestra imagen es el del chaleco.

Vamos a ver como se puede combinar un chaleco amarillo:

1º) CON TRAJES CLÁSICOS: AZUL MARINO Y GRIS.

Los trajes más clásicos son los trajes de color azul marino y gris. Son los trajes que cualquier caballero posee en su armario. En muchas ocasiones se les considera como el uniforme oficial, porque se hace ciertamente difícil el no ver por las calles a alguien con un traje de estas tonalidades.

La esencia de un chaleco amarillo en estos casos es que otorga una luminosidad que contrarresta la sobriedad del gris o del azul marino, que son colores oscuros y de excesivo rigor. El contraste es verdaderamente interesante y muy elegante.

No obstante hemos de tener mucho cuidado en no utilizarlo con azules claros o azulones, porque la combinación no causa el mismo efecto y, por otro lado, si utilizamos un todo de amarillo chillón, el resultado lejos de ser elegante, resulta estridente:

Una de las claves para la utilización del chaleco amarillo con traje azul es combinarlo con corbata también azul marino, el resultado es muy armónico y el efecto es muy redondo.

Por lo que la combinación con traje gris se refiere, hemos de tener en consideración que tiene un efecto similar al que se consigue con el traje azul marino, si bien menos marcado y con menos contraste:

 2º) CON AMERICANAS VERDES O MARRONES 

En estos casos los resultados son más informales, pero no por ello menos interesantes. 

La ventaja del color amarillo es que resulta muy versátil y nos permite combinaciones que pueden potenciar la elegancia, o el carácter menos formal de nuestras combinaciones.  

En estos casos recomiendo la utilización de corbata marrón. El resultado resulta nuca defrauda. Sin embargo, caben otras opciones más atrevidas de desiguales resultados: 

Lucio Rivas