Aspecto de conjunto con la americana camisera (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Continuando con el estudio pormenorizado de las americanas que hemos analizado bajo el común epígrafe genérico de americanas diferentes, vamos en este tercera entrega a centrarnos no en los tonos de color infrecuentes o extraordinarios de las americanas, tal y como como hemos hecho hasta ahora, sino que en esta ocasión vamos a estudiar una americana por razón de su anómalo tejido y no por su color.
El color de la americana camisera debe ser siempre claro (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Detalle de la tela (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
El tejido en cuestión que decidí para la confección de esta chaqueta no es otro que tela de camisa o tela camisera.
Aspecto de la americana camisera (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
En una primera aproximación el hacernos una americana o una chaqueta con tela de camisa parece que asumimos un papel de riesgo, pero que puede dar lugar a un resultado sorprendente si lo analizamos de forma detenida.
El resultado de la tela camisera es siempre sorprendente (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
La tela de color celeste otorga luminosidad (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Recuerdo que en una de mis visitas a la tienda de Púgil en Madrid, me comentaron una iniciativa interesante y era la confección de unos chalecos con tela de camisa, cuyo resultado era atrevido pero causaba un impacto interesante en las combinaciones con las chaquetas más clásicas.
El tejido es muy ligero (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
El tejido es flexible y cómodo (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Se trataba de un tejido ligero, suave y versátil, que permitía multitud de combinaciones. Mientras me contaban las bondades de la prenda, se me ocurrió que si tenía esas posibilidades para los chalecos, ¿por qué no podía predicarse lo mismo para una americana?. Esto permitiría además su utilización frecuente para los meses de verano. La idea tuvo una sensacional acogida por parte de Martín Giménez, por lo que nos pusimos rápidamente manos a la obra.
Eligiendo la tela con Martín |
Selección de la tela |
Lo primero y más importante era la elección de la tela. Esta no podía ser una tela de camisa normal requería tener un gramaje superior al normal, que debía ser no inferior a 180 gramos/m2, en caso contrario corremos el riego de que el tejido resulte excesivamente liviano y no dé el resultado apetecido. Por lo tanto, la tela debía tener un grosor de nivel alto que, a su vez incorporaba dos nuevas limitaciones que condicionaban de forma evidente el resultado. Por un lado, y habida cuenta que una americana camisera es per se un tejido ligero únicamente utilizable en los meses de verano, es prácticamente obligado que sea de tonos claros para su uso estival y, por otro, que la americana debe ser completamente desestructurada al modo de los sastres napolitanos.
Elección de telas |
En el presente caso me decanté por una tela de dibujo que trasmitiera una tonalidad celeste, fácilmente combinable con pantalón azul marino.
El color celeste destaca siempre con tiempo soleado (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Una americana con tela camisera supone que esta puede tener el mismo tratamiento que la de la tela de una camisa, es decir, que puede lavarse y plancharse. Efectivamente así es.
Elección de los botones |
La americana se hizo a medida semi artesanal y he de confesar que lo pasamos muy bien eligiendo los botones, y las telas para el vivo interior.
Tela elegida para el vivo interior |
Proceso de confección |
Proceso de confección |
El resultado no pudo ser más favorable, ya que si una americana con tela camisera da la impresión de ser únicamente susceptible de ser utilizada con indumentaria marcadamente informal, por lo poco convencional de su tejido, sin embargo hemos intentado en este caso demostrar precisamente lo contrario, es decir, que una tela destinada a lucirse con indumentaria nada formal y en periodo veraniego que por su configuración y corte desestructurado se destina a no ser combinada con corbata puede, por el contrario, lucirse en conjuntos formales de resultado sorprendentemente elegante.
Sabiéndola combinar el resultado puede ser muy elegante (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
El conjunto hace que el resultado sea elegante (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
En este resultado juegan, como siempre, un papel esencial los detalles que son los que siempre ayudan a diferenciarnos y a potenciar la elegancia como conjunto y armonía que debe regir en toda indumentaria.
Detalle de la combinación del pañuelo con los tonos celestes de la tela camisera (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Detalle personalizado de las iniciales en las pletinas laterales del pantalón hecho por el magnifico sastre Alberto Olego. (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Los zapatos son el complemento que determina el resultado del conjunto. En este caso unos Oxford de la colección Hand Grade de Crockett & Jones (foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Esto nuevamente nos lleva a la conclusión que siempre manifestamos y mantenemos en este blog, y es que la elegancia no sólo radica en las prendas que llevemos sino, sobre todo, en como las llevemos que a la postre constituye la esencia de un porte personal que es donde se encuentra la esencia de la verdadera elegancia.
(foto: Nacho Areta www.nachoareta.com) |
Lucio Rivas
IMPECABLE REPORTAJE
ResponderEliminarMuchas gracias. Me alegro le haya gustado.
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