La primera acotación que debemos llevar a cabo con relación con el correcto vestir, es que se encuentra relacionado con dos parámetros esenciales. El primero es de carácter objetivo, y se refiere al momento para el que nos vestirnos, y el segundo subjetivo, y es la elegancia interior del individuo. Sin ambos la elegancia, como concepto global, no existe.
The first dimension that must be carried out about the correct dress, is that it is related to two parameters. The first is objective, and refers to the time for us to dress, and the second subjective , and is the inner elegance of the individual.
En cuanto al aspecto objetivo, hemos de manifestar que la elegancia no consiste en vestirse bien, sino que consiste en vestirse adecuadamente para cada momento. Si nos imaginamos un caballero que luce un perfecto esmoquin seguramente pensaremos que viste impecablemente, pero si colocamos a ese caballero en una entorno concreto, como puede ser en la playa en el mes de agosto a mediodía, resulta que la aparente elegancia que porta resulta no ser tal, sino que se transforma en algo realmente grotesco.
On the objective side, the elegance is not to dress well, but dress appropriately for each time. If we imagine a gentleman who wears a perfect tuxedo surely we will think that dresses impeccably, but if you put this gentleman in a particular environment, as can be on the beach in August at noon, is that the apparent elegance holder is not be such, but is transformed into something grotesque.
Por lo tanto, la primera premisa básica consiste en que no hay elegancia si no sabemos vestirnos adecuadamente para cada momento, lo que implica necesariamente conocer de forma detallada lo que indica el protocolo en el vestir, así como las normas sociales y de urbanidad elementales. Esto supone que la elegancia en nuestra indumentaria no puede abstraerse del contexto en el que situemos al individuo, de este modo podemos adelantar que no existe verdadera elegancia si no existe verdadero conocimiento de las normas elementales de protocolo en el vestir.
Therefore, the first basic premise is that no elegance if we do not dress appropriately for each time, which means necessarily know in detail indicating the protocol, in dress as well as social norms and basic civility. This means that the sartorial can not be abstracted from the context in which we put the individual, thus we anticipate that there is no true elegance without knowing the basic rules of protocol in dress.
Por lo que respecta al aspecto puramente subjetivo debemos manifestar que la elegancia precisa, para convertirse en un valor absoluto, de este componente subjetivo que no hace referencia otra cosa que a la elegancia interior del individuo, sin cuya concurrencia la elegancia se queda en una simple imagen estática. No existe nunca elegancia exterior sin elegancia interior. Este componente subjetivo de elegancia interior se manifiesta en nuestros ademanes, comportamiento, amabilidad y educación, lo que supone la esencia del saber estar y del refinamiento, así como del buen gusto y de las normas de protocolo.
With regard to the purely subjective aspect, we must state that the elegance needed to become an absolute value of this subjective component refers to the inner elegance, without whose concurrence is elegance in a simple static image. There is never outside without inner elegance elegance. This subjective component refers elegance inside our gestures, behavior, kindness and education, which is the essence of poise and refinement and good taste and protocol.
La importancia de este aspecto lo podemos comprobar si imaginamos un señor luciendo un traje impecable, perfectamente cortado por las magistrales manos de un sastre acreditado, (imagen estática), pero si ese caballero mantiene una actitud descortés, inconveniente, irrespetuosa, desconsiderada o simplemente desajustada a las normas del comportamiento social, nunca podrá ser considerado como elegante. (Imagen dinámica).
The importance of this aspect we can check if we imagine a man wearing an impeccable suit, perfectly cut by the skillful hands of a reputable tailor, (still image ), but if this gentleman maintains a rude attitude, inconvenient, disrespectful, inconsiderate or just maladjusted the rules of social behavior, can never be considered elegant. (Dynamic image ).
Una actitud displicente siempre hará desaparecer la aparente elegancia de la indumentaria, por lo que la elegancia siempre será un resultado de ambos aspectos, objetivo y subjetivo. El objetivo lo podremos comprar, a través de las manos de un buen sastre, pero el segundo no se puede comprar. Sencillamente se tiene o no se tiene.
A cavalier attitude will always apparent elegance of dress disappear, so that elegance is always a result of both, objective and subjective. The goal we can buy through the hands of a good tailor, but the second can not be bought . He simply has or does not have.
El
caballero que aglutine ambos aspectos será siempre elegante, con independencia de
que vista con frac, con indumentaria informal o se encuentre en ropa interior.
The gentleman who brings together both aspects will always be elegant, regardless of view in tails, with casual clothing or is in underwear.
Lucio Rivas
No hay comentarios:
Publicar un comentario