En temporada estival, cuando nuestro destino es la costa, debemos guardar también determinado protocolo a la hora de vestir. La ausencia de rigor formal nunca puede suponer abandonar las normas básicas del saber estar y del saber vestir de forma adecuada.
1º) Por la mañana.
Cuando vamos a la playa y vestimos bañador debemos tener siempre presente los siguientes principios:
- El bañador debe ser un bañador que llegue a mitad del muslo. Los bañadores tipo pirata son impresentables de todo punto de vista, y los bañadores tipo bermuda son inapropiados porque esas dimensiones son propias de los pantalones cortos y no de los trajes de baño.
- Nunca debemos acudir a la playa con el torso descubierto, es un hecho bastante ordinario. Debemos acudir bien con un polo o con una camisa. A mi particularmente no me gustan los polos, los considero prenda propia de la práctica deportiva, no en vano su denominación viene de ahí, de la practica del polo, por lo que no dejan de ser en realidad camisetas para la práctica del deporte. Yo sólo utilizo para estos menesteres camisas. La camisa no ha de ser cualquiera, debe ser una camisa de lino de manga larga debidamente ramangada. Yo prefiero siempre una polera antes que una camisa. La polera es muy versátil y recalca el carácter informal ante el que nos encontramos.
- El calzado para acudir a la playa ha de ser tipo alpargata, las chanclas u otro calzado de goma es más propio para las piscinas y balnearios, es decir, para ser utilizados en aquellos momentos en los que estamos en contacto permanente con el agua. Si queremos utilizar chanclas de goma para ir a la playa, debemos acudir con nuestras alpargatas y sólo cuando estamos a punto de entrar en la arena de la playa podemos sutituir un calzado por otro.
- El tocado de la cabeza debe ser sombrero y nunca gorra. El sombrero ha de ser un sombrero panamá.
- Un último detalle importante, es que si es posible debemos procurar que la toalla que portemos armonice con los colores del bañador, de esta forma conseguiremos un conjunto perfecto.
2º) A mediodía.
A la hora de acudir al almuerzo la indumentaria exigida es siempre pantalón largo y camisa. Cuando digo camisa siempre ha de entenderse camisa de manga larga, porque la camisa de manga corta es una prenda tan bochornosa y poco presentable que no merece mi consideración ni mi atención, y que debe ser siempre descartada de nuestra indumentaria y de nuestro armario. El calzado, por su parte, debe ser siempre mocasines o loafers sin calcetines.
3º) Por la tarde.
En zona de costa la tarde es el momento del paseo. En estos casos se permite la utilización de pantalón corto. El pantalón corto debe entenderse como pantalones bermudas. El pantalón debe ir acompañado siempre de una camisa y el calzado debe ser, bien alpargatas o mocasines. Una de las prendas de calzado que nunca debe utilizarse, por lo esperpéntico que resultan, son las sandalias que deben estar apartadas siempre de nuestro armario.
4º) Al anochecer.
En el momento del atardecer el pantalón corto debe desaparecer y ser sustituido por pantalón largo. Si veraneamos, como es lo aconsejable, en lugares de costa del norte, que resulta lo conveniente cuando pretendemos otorgar rigor y elegancia a nuestro atuendo veraniego, ya que la temperatura en esas zonas costeras nos exige siempre la utilización de americana al atardecer, debemos recordar que esta debe ser siempre de tejidos como el lino o seersucker. En este momento el sombrero panamá puede ser sustituido por un canotier o similar. El calzado seguirá siendo mocasines o loafers. No hay que olvidar que debemos siempre desprendernos del sombrero en lugares cubiertos.
(Todas las imágenes han sido tomadas este verano en Biarritz).
Lucio Rivas
Maravillosa explicación, ahora a ponerla en práctica.
ResponderEliminarMuchas gracias. Celebro le haya gustado.
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